En esta semana nuestro país ha entrado en la senda de la estabilidad y el progreso tras la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. Se ha iniciado el camino para que nuestra provincia recupere el puesto que se merece, un reto que los y las socialistas afrontamos con esperanza e ilusión ante los importantes retos que tiene Málaga y el conjunto del país.

Pedro Sánchez ha logrado el respaldo mayoritario del Congreso tras ganar en las urnas en hasta dos ocasiones seguidas, recogiendo el mandato de una ciudadanía que está cansada ya de los reproches y el bloqueo institucional que se ha alentado desde los partidos de derecha y afines.

Por eso, ahora es tiempo de abanderar la igualdad y la libertad para todos y todas, no es el momento de seguir enrocados en el frentismo que tanto PP como su brazo extremo, Vox, y sus compañeros de viaje, Ciudadanos, pretenden para la política española. Es tiempo también de estar a la altura para revertir todos los recortes que nos dejó un gobierno, el de Rajoy, que acabó fagocitado por la corrupción de su propio partido. Es tiempo de progresar, y los socialistas haremos todo lo que esté en nuestra mano para solucionar los problemas reales de la gente, no para seguir siendo parte de ellos.

Y dentro de ese compromiso se incluye una agenda de medidas entre las que destacan la recuperación de derechos laborales con la derogación de la reforma laboral con la que la derecha ha precarizado a los trabajadores y afianzan la dignidad de un puesto de trabajo con la subida del Salario Mínimo Interprofesional. De igual forma, acabaremos con el caos que el PP introdujo en la educación pública derogando la LOMCE y blindaremos este pilar del Estado del Bienestar junto a la sanidad pública y a la aplicación de la Ley de Dependencia.

Por último, los pensionistas, los jóvenes y las mujeres volverán a estar el centro de nuestras políticas, sectores de la población a los que la derecha no solo ha dado de lado sino sobre los que cargado la parte más cruel de la última crisis económica, la misma crisis que solo ha beneficiado a los que más tienen.

En definitiva, ha llegado la hora de gobernar. Con diálogo y acuerdo, dándole voz y esperanza a esa mayoría de voces que han vuelto a confiar en el PSOE para seguir liderando el avance y el progreso de nuestro país y el de la provincia de Málaga, como hemos hecho siempre.