BLOGOSFERA

Debates, pactos y soluciones
\'El 21,1% de los españoles vive en situación de pobreza. El 35,8% de los parados está en riesgo de pobreza\'. \'Unos 150 vecinos de La Palma evitan el desahucio de una familia\'. \'Uno de cada cuatro españoles está desempleado\'. \'La tasa de paro en Andalucía supera el 35%, diez puntos más que la media nacional\'. Son titulares de esta semana impresos en el periódico que tiene en sus manos. Las palabras ocultan la realidad, aunque ésta aprieta tanto que acaba siendo visible, incluso para los ojos más cegados. Cuando el debate público y político y mediático se llena de reflexiones sobre la situación de los partidos, sobre resultados electorales, sobre porqués siempre escritos al socaire de no sabemos muy bien otros porqués, la mayoría de la gente se enfrenta a su vida diaria con sacrificio, sin esperanza e inseguridad.
Cuando escucho a algunos líderes políticos de la derecha pedir pactos para la clase política interpreto que ofrecen pactos para su pura supervivencia. A mí me interesan los pactos que garantizan los derechos de la gente, de todos y todas sin distinción, basados en la justicia, aquellos pactos que protegen la libertad de las personas. No me interesan los pactos que reivindican a los políticos por nosotros mismos; sí defiendo los pactos por la política.
Es obligación dedicarse a las soluciones y dejar de marear la perdiz. Si los políticos somos un problema es porque a día de hoy las soluciones no arreglan nada, y las del Gobierno de Rajoy sólo han hecho empeorar las cosas, y lo que es peor, roban día a día el aliento a un país cuyos ciudadanos no saben qué pasará mañana con su empleo -o con la prestación por desempleo-, con el hospital que lo atendió la semana anterior o con la educación de sus hijos.
No es tiempo de pensar en nosotros, es tiempo de pensar en las respuestas reales a los problemas que nos abofetean la cara. Los socialistas debemos reflexionar mucho, asumir errores y actuar, actuar por una sociedad más libre y más justa, y por una democracia en mayúsculas. Actuar gobernando, como el presidente Griñán, que traza un camino distinto: no hay ninguna otra comunidad que vaya a plantear un programa de ayudas a las familias con parados sin recursos, 60 millones de euros. Los socialistas hemos elaborado una ley de segunda oportunidad, que aborda la inapelable reforma del sistema hipotecario en España. Mientras se rescatan bancos por millones de euros, millones de familias ven cómo los bancos se quedan con su casa y siguen aguardando en la calle a cobrar las deudas. Es inadmisible que una deuda no quede pagada por el bien que sirvió para contraerla.
Mientras todo esto ocurre, el Gobierno de la contrarreforma ideológica deja sin fondos a los ayuntamientos para financiar sus servicios sociales. Un 67% menos de dinero en sólo dos años para el plan que integra los recursos de las tres administraciones y que procura protección, asesoramiento y ayuda a miles de familias. Los ayuntamientos malagueños recibirán 1,6 millones de euros menos. ¿Y qué significa? Más de 4.200 familias se quedarán sin ayudas extraordinarias. En las enmiendas al fúnebre presupuesto aprobado por el PP, los socialistas malagueños hemos incluido un plan especial de empleo, porque siempre hemos creído que las políticas de austeridad sin estímulos acabarían ahogando al país, como ha ocurrido.
Necesitamos un pacto, pero no a cualquier precio. Necesitamos reformas, pero no recortes en derechos. Necesitamos saber qué ha pasado para que no se vuelva a repetir.