El PSOE pedirá que ningún cargo de confianza de la Diputación de Málaga pueda tener sobresueldos por actividades privadas


Conejo: "Ahora entendemos la rebaja de sueldo de Salomón Castiel. Bendodo va a permitir que cobre de otras instituciones como empresario privado"


El Grupo Socialista de la Diputación de Málaga ha anunciado hoy que exigirá que la institución provincial anule y no aprueba más compatibilidades para sus cargos de confianza, al considerar que "los cargos de confianza y directivos, que están muy bien pagados, no deben tener sobresueldos por actividades privadas, sean comerciales o en cualquier otro ámbito, y que su dedicación debe ser exclusiva, ya que ostentan cargos de gestión", ha declarado el portavoz, Francisco Conejo. "La dedicación de este personal, al que se le supone gran capacidad de gestión que casi los hacen imprescindibles en palabras del presidente, debe ser exclusiva legal y éticamente", ha afirmado Conejo. En las últimas horas varios medios de comunicación han publicado la noticia de que el actual director general de la Térmica, Salomón Castiel, tiene previsto pedir la compatibilidad para hacerse cargo, mediante su empresa privada, de la comunicación y el márketing del Unicaja baloncesto.

Debemos recordar que Castiel, uno de los cargos mejor pagados en este país hasta este mes de enero, tenía un sueldo de 90.000 euros. Recientemente, sus retribuciones han pasado a cifrarse en 59.900 euros brutos anuales. "Ya nos parecía a nosotros extraño que Salomón Castiel fuera a sentir la crisis en su bolsillo. La segunda parte de la historia era ésta: vía libre para facturar con su empresa privada. Está claro que Castiel nunca va a dejar de ser uno de los cargos públicos mejor pagados de España, vengan los ingresos del ayuntamiento de Málaga o del de Valencia, la Diputación o un club de baloncesto", ha explicado Conejo.

Para el portavoz, esta decisión supondría un "insulto a la ciudadanía". "O Castiel es un superhombre para desarrollar dos tareas de primer nivel o la Térmica no necesita un director general, ni en exclusiva ni a tiempo parcial. Descartando lo primero, más bien sobra Castiel en la Térmica, a la vista de que se subcontrata su programación, como queda claro en el presupuesto bajo el epígrafe de trabajos de otras empresas. En vez de aprobar la compatibilidad, Bendodo debería firmar el decreto de destitución de Castiel, con un ahorro de 59.900 euros brutos anuales para la institución", ha explicado el portavoz. "Al fin y al cabo, no le falta trabajo", ha agregado.

Para los socialistas, esta situación deriva de un "encontronazo político con la diputada de Cultura y Deportes, Marina Bravo, quien además se trae a un funcionario del Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre en comisión de servicio a dirigir su área, como si la Diputación no tuviera personal funcionario capacitado y con amplios conocimientos en la materia", ha explicado Conejo. Son conocidas las desavenencias de bravo con Castiel y Antonio Jesús López Nieto. "A los dos Bendodo le ha dado su juguetito a costa del contribuyente: al primero, la Térmica; y al segundo, la oficina de alcalde. Una solución a un conflicto personal y político un poco cara. Y como no se fía de ninguno de los dos, les ha puesto por encima al vicepresidente Oblaré, para que demuestre lo que aprendió en el master de San Telmo a costa de la Diputación", ha explicado el portavoz.

Si Bendodo le da la compatibilidad a Castiel, estará abriendo una espita en la Diputación: sentará un precedente entre la plantilla de cargos de confianza mejor remunerados de las diputaciones andaluzas para que desarrollen actividades en el ámbito privado. "Tememos que sea el primero de muchos", ha asegurado Conejo.

Hasta ahora, las compatibilidades se habían dado para el ámbito académico. En diciembre 2011, el equipo de gobierno aprobó que dos altos directivos de la Diputación, el director general de Recursos Humanos y Servicios Generales y el director general de Economía y Hacienda pudieran tener ingresos por actividades en las universidades de Málaga y de Alcalá de Henares.

En concreto, el por aquel entonces director de Recursos Humanos y Servicios Generales, Antonio Peñalver -que fue destituido a comienzos de años- cobraba 94.380 euros, obtuvo la compatibilidad para ejercer como profesor asociado en la Universidad de Alcalá de Henares, puesto por el que cobraría 7.114 euros al año y que desempeñará una tarde a la semana; mientras que el director general de Economía y Hacienda, con un sueldo de 76.000 euros brutos anuales, sigue teniendo la compatibilidad para trabajar en la UMA tres tardes a la semana durante dos horas, con un sueldo de 5.385,36 euros.

Estas dos compatibilidades fueron rechazadas por el Partido Socialista con los mismos argumentos que se esgrimen ahora en el caso de Castiel. "Creemos que los cargos de confianza deben tener dedicación exclusiva" ha afirmado Conejo, quien ha recordado que el equipo de gobierno dio marcha atrás en su intención de aprobar la compatibilidad a dos de sus diputados para que pudieran ejercer actividades económicas privadas.


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